martes, 5 de enero de 2016

Si ves a un necio



Dios nos libre de la necedad, y nos cuide de los necios…

·       Comentarios técnicos
·       De qué trata el tema

Comentarios técnicos
Che, pero ese comienzo no se parece a aquel tema de Miguelito Jack..? Sí, sí… no voy a ser tan necio como para decir “¡Ah! ¿no me digas? No sé, te parecerá a vos...” Y sí, me di el gusto... ¡qué tanto!
Una vez alguien me preguntó: ¿Cómo hacés para imitar el estilo sin que te salga un tema que sea una copia? Y para responder se podría discursear un poco acerca de la observación de formas musicales empleadas: frases, motivos, número de compases, esquemas rítmicos, o qué tipo de armonías utiliza, etc., etc… Otra forma más directa consiste en copiar lo mejor que se pueda: los buenos músicos tienen la desgracia de que lo copian igualito… los otros ponemos cara de Mozart y vamos corriendo a SADAIC…
Bien, fuera de toda broma, empecé el tema haciéndolo descaradamente parecido al comienzo del de Jackson, ritmo parecido, bajo parecido… la melodía no, naturalmente… Ya al comenzar las estrofas, Miguelito se va a un costado y aparece la influencia de los hermanos Gibb, (por supuesto, si lo hubieran cantado ellos sonaría mejor, se hace lo que se puede)… la influencia de Parsons no podía estar ausente en el último tema de Thesis, hay, entonces, un coro de fondo a partir del intermedio con una guitarra levemente gilmouriana al frente (a Parsons le hubiese gustado, estimo)… no tan al frente por mi exclusiva responsabilidad.
Gustavo Villanueva tocó la guitarra en este tema. Gran guitarrista Gustavo, además un tipo que entiende del resultado final de la obra, por eso se puso al servicio de ella… Fue mucho más allá de lo que le pedí, mejorándolo todo, y aportando una enorme calidad al tema.
La toma del coro, que no tiene letra sino que es un fondo vocal, si no me equivoco se hizo aprovechando su visita al estudio cuando grabamos “Bufón del reino”, que tenía también una parte coral.
Todo se grabó en Vitrola Records, como siempre, con Gustavo al frente de las máquinas. Hay quienes pueden creer que se trata de una cuestión meramente técnica, pero cada etapa tiene lo suyo y ninguna debe ser subestimada. Estoy convencido de que la mezcla es una obra de arte en sí misma. La mezcla de este tema no fue fácil, especialmente la última parte donde está todo sonando: voces reales (coro), voces virtuales, sonidos de batería, de cuerdas, bajo, sintetizadores, y, además de todo, y complicando aún más las cosas, estaba la superposición de letras en la voz principal. Fue un verdadero reto y, más allá de los gustos, obviamente subjetivos, se logró lo que se buscaba.

De qué trata el tema
Tal vez el diablo tiene cara de estúpido…
Uno a veces se asustaba, o se reía, de que algunos tipos tan evidentemente de pocas luces tuvieran tanto éxito, y uno decía “bueno, no importa, es simpático… y no hace mal a nadie, se divierte... vos le vas a dar la mano y el tipo te retira la suya y todos nos reímos muchísimo…” qué se yo, por ahí a uno no le causaba gracia, pero podía entender que a organizaciones psicofísicas menos exigentes, por ejemplo un niño de cuatro años, esto le hubiera podido producir alguna clase de gracia… y no hacían daño. Y de golpe esos tipos dejan de sacarte la silla cuando te vas a sentar, y empiezan a ser mentores ideológicos de la sociedad, esos mismos tipos empiezan a opinar, y esa opinión entra más que la opinión de los maestros, de los académicos, de los que han estudiado esos asuntos. Y ahí nos encontramos con que realmente sí podían hacer daño… y  que a lo mejor, como dijo alguien alguna vez aquí mismo, el diablo tiene cara de estúpido… y que hay una rima siniestra entre ese chiste que uno desprecia por demasiado simple y esa visión del mundo que uno desprecia por demasiado simple o demasiado egoísta. Y también encuentra uno una relación entre tantos males, tantos odios, que son hijos de la malevolencia y también de la estupidez.  
Así que... habrá llegado el momento de preocuparse un poco no solo por los malvados, que hay muchos, sino por los estúpidos, que hay más.
Se lo digo desde las colinas de mi propia estupidez…
Hasta aquí Dolina en la radio, que terminaba invitando a la gente a no escuchar su programa, o, al menos, a no escucharlo con la aprobación abierta, sino a buscar instancias superiores, a buscar el saber adonde está y no donde no está, no en los decires automáticos de personas simpáticas…
Y, siguiendo su sabio consejo, no he de dar esto por bueno porque lo diga Dolina, con el que muchas veces no puedo estar de acuerdo, sino porque es un texto de una evidente lucidez.
Esa idea ha influido claramente en “Bufón del reino”, pero si “Bufón…” trata de los males sobre la sociedad, en el caso de “Si ves a un necio” hay una preocupación más doméstica…
 “Es como un juego para el necio el hacer mal, y para el sensato el ser sabioProverbios 10,23 o, en lenguaje actual: “Al tonto lo divierte la maldad; al sabio lo entretiene la sabiduría
Hay mucha gente perfectamente capaz de hacer daño, no por maldad, ni siquiera por error, que es algo que puede suceder, sino por estupidez…
Dios nos libre de la necedad, y nos cuide de los necios…
¿Qué consejo le darías a un hijo sobre este asunto?
    De eso trata el tema.

Letra, música, voz, programación: Raúl Squilache
Guitarras: Gustavo Villanueva
Agradecemos la participación del 
Coro de la Facultad de Ciencias Económicas UNER Dirección: Eduardo Retamar

4 comentarios:

  1. Excelente!!!! La influencia de música de la buena, aquí encuentra sus frutos... Y en la letra, el autor deja ver todo otro tipo de influencia, que siempre busca, de la que siempre se nutre, para mejorar el alma...intentando mejorar nuestro propio entorno.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas Gracias, por leer, por escuchar y por comentar!!!

      Eliminar
  2. Estimado Señor Raúl Squiii...mejor no completo el apellido por las dudas confunden con un profugo que capturaron mediáticamente por los medios. Estimado Señor Raúl, no puedo evitar enojarme con usted por 2 cosas: una porque se me acaba de caer un lagrimón bañado en nostalgia por recordar esta exelente obra musical; y 2, por esconder este hermoso talento artístico que debe ser liberado ya, porque inevitablemente agita sus alas para emprender su vuelo propio. Estas alas con gran experiencia y sabiduría desean acariciar los días y las noches allí, dónde solo hay vacíos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡¡Muchas Gracias Armando!! Y que se sepa que este tal Armando es una gran voz y un compositor que logra con increíble naturalidad unas melodías y unas armonías que están a la altura de los realmente mejores, de los que hemos admirado siempre... ¡Mayor razón aún para agradecer su comentario!

      Eliminar